El país del Dorado

Vivo en el país de la famosa leyenda de El Dorado, y a pesar de los tesoros y riquezas de las que esta habla, la mayoría de las personas viven en la pobreza, y no me refiero a pobreza material ni académica. Me refiero a un tipo de pobreza aún mayor, que a su vez es la causa de la pobreza material y académica; y es la dificultad para hacerse cargo de sí mismo. Esto hace que las personas caigan en el mesianismo, esperando que alguien los salve y haga por ellas lo que no son capaces de hacer por sí mismas.
Cuando comprendamos que El Dorado no es algo material, sino que es la riqueza que habita en el interior de cada persona y radica en la capacidad de hacerse cargo de sí mismo, habrá abundancia, y lo mejor es que esta abundancia no es generada por factores externos. Es el resultado de la gestión de cada persona. Y así como el tesoro de la leyenda es esquivo, de igual manera hacerse cargo de sí mismo no es fácil; implica mirar hacia adentro y hacer a un lado cualquier tipo de justificación.
Mientras la mente de una persona esté llena de justificaciones no podrá encontrar El Dorado.